Jornada de lucha de palmo a palmo. Desde las periferias de Lima se gestaron las coordinaciones para la gran movilización contra Keiko Fujimori y su organización «política» criminal y mafiosa. Toda la capital latió a un solo ritmo junto al resto de ciudades del país en una masiva marcha de rechazo al fujimorato.
Y nuestro distrito no podía quedarse al margen de este proceso social. Por ello, desde aproximadamente un mes se organizó la Coordinadora Antifujimorista de San Juan de Lurigancho (CASJL) agrupando a estudiantes y trabajadores, a vecinos y vecinas del barrio, quienes nos autoconvocamos semana a semana para armar vigilias y piquetes en puntos estratégicos para informar a la ciudadanía el enorme peligro del posible retorno de la dictadura fujimontesinista.
Parte de este proceso de organización y unidad fue la movilización que convocó la CASJL desde el Parque Del Maestro hasta la Plaza San Martín para continuar con el largo recorrido por todo el centro de Lima. Nos articulamos y formamos un grupo nutrido compuesto por integrantes del Grupo Paratíteres (batucada), Ni Una Menos SJL, Voto Sin Miedo, SJL en Acción, Movimiento Javier Heraud, Nuevo Perú Culturas, entre otros, quienes hacen parte de dicha coordinadora
Caminamos arengando con entusiasmo y mucha energía. En el trayecto se nos fueron sumando más vecinos a la altura del Mercado de Flores y Piedra Liza (Rímac) hacia Acho, y luego enrumbamos por la avenida Abancay para luego entrar por la avenida Nicolás de Piérola hasta unirnos a la gran masa de pueblo consciente y valiente.
Durante el recorrido destacó el nivel de organización y criterio para mantener el orden y la seguridad interna. Asimismo, nuestro bloque de batucada (jóvenes artistas del distrito) se mostró muy enérgico e incansable hasta el final. Mientras tanto, nuestras banderolas y volantes eran recibidos con efusividad a su paso por las calles del trayecto.
Ya en la marcha general nos hicimos parte de un mismo eco por justicia y dignidad. Nunca bajamos los brazos ni dimos tregua a la difusión de consignas y denuncias desde los megáfonos o desde las gargantas combativas. Ni los apagones a lo largo de la avenida Wilson, ni las provocaciones fujimoristas, ni la poca o nula cobertura periodística de los mass media, nos amilanó. Seguimos caminando convencidos de nuestra lucha y sin temor a las calumnias.
Cabe destacar el espíritu rebelde y contestatario de un distrito con legado histórico que cuando las papas queman siempre se pone de pie. Desde San Juan de Lurigancho le decimos a la Señora K y la mafia fujimorista que ¡No pasarán!
Por justicia y dignidad: ¡Fujimori nunca más!
¡Viva la Coordinadora Antifujimorista de San Juan de Lurigancho!