En el Día de San Valentín, no dudaron en convertir una bodega en un bar clandestino. Esta fachada de bodega funcionaba en la zona de Huáscar, en San Juan de Lurigancho
Las cámaras de Buenos Días Perú se evidencia: música a todo volumen, decenas de botellas de cerveza, sujetos totalmente ebrios violando el toque de queda en plena segunda ola de contagios.
Sin embargo, para la propietaria del bar clandestino, conocida como la Tía Cupido, se justifica porque tiene deudas que pagar.
Los efectivos policiales detuvieron a la mujer quien será procesada por violar las normas sanitarias con una pena no menor de seis meses ni mayor de tres años
Fuente: Buenos Días Perú